El freno de estacionamiento es un sistema de frenos diferente al de la máquina principal, que se opera presionando el pedal del freno. Al aplicar el freno de mano, se acciona un sistema de cables independiente diferente del sistema de frenado principal, que se acciona mediante el líquido de frenos.
Freno de mano o freno de emergencia es lo mismo. El freno de estacionamiento detiene el vehículo con las pastillas de freno traseras.
Las pastillas se accionan esta vez mecánicamente y no hidráulicamente, como en el caso del freno normal. Del freno de mano sale un cable que se divide en dos cables separados que accionan mecánicamente cada placa por separado.
La idea del sistema es ofrecer la posibilidad de frenado de emergencia en caso de que el sistema de freno principal deje de funcionar.
El freno de estacionamiento también se conoce como freno de estacionamiento. Se acciona cuando el coche aparca el coche y lo deja abierto porque bloquea las ruedas traseras y evita el desplazamiento de la máquina.
En el caso de los automóviles con transmisión automática, muchos de los nuevos modelos vienen con freno de mano o estacionamiento controlado eléctricamente. Vienen equipados con un botón que no se puede operar sobre la marcha después de una determinada velocidad. Su finalidad es que cuando el coche esté en el “Park” para inmovilizar las ruedas traseras.
Además, para los automóviles con un sensor de movimiento orientado hacia el frente (no sensores de estacionamiento), el sensor escanea todo lo que está frente al automóvil y, si ve un peligro que el conductor no puede evitar, el automóvil frenará por sí solo.
En casos excepcionales, independientemente de la velocidad de desplazamiento, el automóvil aplicará los frenos con fuerza, incluido el freno de emergencia.
Fuente de la foto: haynes.com